No podría elegir mejor post para empezar este blog que unas conclusiones que ha extraído la Asociación Europea de Asesores Financieros de estos casi cuatro años de crisis.
Son conclusiones de las que todos hemos oído hablar en infinidad de ocasiones: diversificar, planificar, valorar los riesgos, saber dónde se invierte e invertir con cabeza... pero eso que todos sabemos es en lo que fallamos. Una y otra vez. La historia está repleta de burbujas, bluffs o como lo quiera llamar cada uno, desde la tulipomanía (principios del s. XVII) hasta las subprimes (principios del s. XXI).
Nos dejamos engañar por la euforia colectiva ("la bolsa siempre sube, caballero" -crack del 29-) gente normal y corriente, con un trabajo normal y corriente, deja de trabajar para engrosar la espiral especulativa, la burbuja. No les culpo. Cualquiera se sentiría estúpido si hace cinco años no hubiera dejado la empresa de fontanería para montar su propia fontanería. Si no hubiera invertido esos ahorrillos para comprar un piso en la playa (con alfombra roja al crédito bancario mediante). Unas acciones en cualquier constructora del IBEX.
Todo el mundo dejó su oficio para ganar dinero fácil y cuando uno se dedica a lo que no sabe...
Lee la noticia completa en Cincodias
